Seguramente ya hayas visto esas manchas grisáceas del suelo cuando paseas por tu ciudad. Estas manchas no son ni más ni menos que los chicles que de vez en cuando tiramos al suelo, pensando que no harán ningún mal a nadie. En Barredoras Antoli queremos participar en la erradicación de este mal hábito y concienciar a la población sobre los peligros que supone tirar chicles en las vías públicas, tanto para nosotros mismos como para otros seres vivos.
Entonces, ¿qué supone tirar un chicle al suelo? Son muchos los problemas que puede originar un solo chicle cuando no lo depositamos en una de las muchas papeleras de la ciudad:

Las aves mueren por ingerir chicles. Cuando un pájaro ve un chicle en el suelo, suele confundirlo con comida. El chicle se pega al pico, impidiéndoles comer y beber hasta que mueren.

El coste de limpiar un chicle oscila entre 0.16€ y 0.30€, entre 3 y 6 veces más que su precio en tienda. Además, después de todo el esfuerzo humano y económico que supone deshacerse de este producto en las calles, la velocidad con la que los chicles vuelven a aparecer es increíble.

Un chicle puede tardar hasta 5 años en descomponerse. Los chicles están compuestos por plástico casi en su totalidad, por lo que perdurarán por mucho tiempo en las calles.

Los chicles albergan entre 50 mil y 70 mil bacterias si está fresco, lo que los convierte en focos de infección y de contaminación con un gran impacto en la salud de la población. Los chicles depositados en las vías públicas pueden transmitir enfermedades vía aire a las personas, tales como la tuberculosis, la salmonelosis o el estafilococo.

Arrojar un chicle al suelo puede costarte entre 400 y 1500 euros. En Córdoba, existen multas para aquellas personas que arrojan chicles a la vía pública. Esas personas se identificarán mediante un análisis de ADN del chicle en cuestión. La multa variará según el lugar donde se ha arrojado el chicle, el tiempo que haya sido masticado y la cantidad de chicles arrojados por esa misma persona.

En Barredoras Antoli apostamos siempre por una ciudad limpia de la que todos podamos disfrutar, por eso te pedimos que deposites tu chicle en el contenedor más cercano.